ATROFIA BLANCA
Anamnesis
• Paciente varón de 54 años.
• Niega enfermedades y uso de medicación.
• Niega procedimientos quirúrgicos.
Signos y síntomas
• Paciente acude a consulta por presencia de dolor, edema (hinchazón), piernas pesadas y cansadas, y evidencia de cambio de color de piel.
• Menciona tiempo de enfermedad de aproximadamente 2 años.
Examen físico
• Se observa la presencia de edema blando hasta tercio medio de la pierna derecha. La digitopresión produce leve dolor y evidencia la presencia de cordones varicosos gruesos.
• Presencia de cordones varicosos desde tercio superior de pierna hasta maléolo interno.
• Se observa hiperpigmentación (piel más oscura) difusa hasta tercio medio de la pierna y presencia de atrofia blanca (piel de color más clara y adelgazada) en región medial, desde maléolo interno hasta tercio inferior.
• No presencia de eccema o úlceras.
• Pulso pedio presente.
Diagnóstico
1. Enfermedad venosa crónica – Grado clínico C4b
2. Hiperpigmentación
3. Atrofia blanca
Tratamiento
1. Eliminar reflujo
2. Terapia compresiva de 20-30mmHg
El paciente acude por síntomas de intensidad moderada, lo que más llama su atención es el cambio de color de piel, no sólo se observa hiperpigmentación (color más oscuro de la piel), sino que también hay áreas blancas en el centro, esta clase de cambio se llama atrofia blanca. La atrofia blanca es una complicación peligrosa porque son áreas de piel que van perdiendo la vascularización y se ulceran fácilmente; se producen por la hipertensión venosa prolongada que ocasionan las várices y lamentablemente son lesiones irreversibles, una vez que el tejido se ha afectado, no se puede revertir esta condición.
Aunque es un proceso irreversible, se tiene que eliminar el reflujo venoso, ya que, de mantenerlo, se van a extender las áreas de atrofia blanca y el cuadro podría progresar y producirse una úlcera venosa. En Varicentro, el tratamiento que realizamos para eliminar el reflujo venoso se llama escleroterapia con espuma, que consiste en inyectar un medicamento en las venas varicosas para producir el cierre de estas, la formación de un cordón fibroso y propiciar su degradación; de esta manera no sólo se detendrá el progreso de la enfermedad, sino que se previene la aparición de una úlcera.
Además de eliminar el reflujo, se debe usar terapia compresiva; debido a la gravedad de la enfermedad del paciente y el riesgo de aparición de una úlcera venosa, se sugiere que se use la compresión no sólo durante el tratamiento, sino de por vida.
Pronóstico
Al eliminar el reflujo venoso, detenemos la progresión de la enfermedad, lamentablemente no se revertirá la hiperpigmentación ni la atrofia blanca; a pesar de ello, el tratamiento es muy necesario, si no se elimina el reflujo, hay una alta probabilidad de desarrollar una úlcera venosa.
Siempre se les menciona a los pacientes que todos los tratamientos, incluido el que brindamos en Varicentro, están dirigidos a eliminar las venas varicosas que existen en ese momento, que ninguno puede prevenir la formación de várices futuras, que ninguno puede “curarlos para siempre”. En el caso de este paciente, que posee una enfermedad en un grado clínico avanzado, significa que debemos vigilarlo periódicamente, luego de finalizar su tratamiento, debe acudir a citas control cada año para eliminar las nuevas várices que se formarán antes que lastimen el tejido nuevamente.
El pronóstico de este paciente es intermedio, ya que debido a la progresión de la enfermedad los tejidos se han lastimado, las recomendaciones son acudir a sus citas control y usar terapia compresiva todos los días para disminuir la probabilidad de que desarrolle una úlcera.